sábado, 30 de abril de 2011

Los íberos: Santuario Ibérico de la Lobera, en Castellar (Jaén)

Conocido como Cuevas de la Lobera o del Biche se encuentran en la carretera a Sorihuela a 1’5 Km. del pueblode Castellar, en la provincia de Jaén; después de dos curvas las cuevas quedan a nuestra derecha y situadas a pocos metros de la carretera 3.210, casi frente un abandonado hostal a la izquierda,que nos facilitará el aparcamiento y el cambio de sentido con cierta seguridad.

Son estas cuevas obras de los íberos, que se establecieron a finales del siglo V a.C. y permanecieron hasta el I a.C.

El santuario esta construido sobre una cornisa rocosa,aprovechando las cuevas naturales. Esta constituido por tres cuevas, con hornacinas entre ellas, la mayor mide 32 m2 de superficie, llamada la Caverna del Idolo, por delante se sitúa una explanada artificial de unos 170 m2, que serviría para reunir a los fieles adoradores de la divinidades de los íberos, como la luna o la diosa de la fertilidad. El Poblado se situaría tanto arriba del monte,como debajo de la explanada.

En el Santuario Ibérico y en la explanada, al realizar en 1.887 las obras de la carretera de Navas de San Juan a Sorihuela, aparecieron (según unos autores más de dos mil y según otros más de seis mil) exvotos Tres Damas de Castellar o estatuillas de bronce entre 5 y 20 cm, que representaban figuras femeninas y masculinas orantes y oferentes, algunos guerreros a pie (nunca a caballo, como en el de Despeñaperros) y animales (perros, peces, faisanes, jabalíes y caballos).

Poco y mal estudiado el yacimiento, debido a la negativa de los antiguos dueños, que estuvieron vendiendo durante años los exvotos en poblaciones cercanas a Castellar, no es objeto de excavaciones arqueológicas hasta 1917 por R.Lantier y J.Cabré ¡treinta años despues de su descubrimiento! Tienen que transcurrir otros cinquenta para que en 1967 y en 1972 Nicolini realice la segunda y la tercera campaña arqueológica.

Los exvotos figuras unas veces toscas y otras finamente labradas, unas desnudas y otras con túnicas, constituían las ofrendas a los dioses de los fieles que se acercaban al santuario en señal de agradecimiento y adoración.

Se clasifican las femeninas en oferentes, en actitud de ofrenda, y en Damas o sacerdotisas, en posición de adorar a la divinidad, estas ultimas con trabajadas túnicas y altas cofias. Estarían labradas por artesanos locales y vendidas al pie del Santuario. Actualmente se pueden ver en el Museo Ibérico de Castellar, Museo Monográfico de Cástulo, Museo Arqueológico de Ubeda, Museo Provincial de Jaén, Museo Arqueológico Nacional de Madrid, Museo Arqueológico de Barcelona, Real Academia de la Historia de Madrid, Museo del Louvre de París, entre otros museos, además de existir piezas en varias colecciones particulares.